RESFRIADO COMÚN EN EL NIÑO
INTRODUCCIÓN – El resfriado común es la enfermedad más frecuente en los Estados Unidos. Los niños son afectados más a menudo y experimentan síntomas más prologados que los adultos. El resfriado común es el responsable de 22 millones de días perdidos de escuela y 20 millones de ausencias al trabajo, incluyendo el tiempo alejado del trabajo para cuidar a los niños enfermos.
CAUSAS – El resfriado común es un grupo de síntomas causados por un número de virus diferentes. Hay más de 100 variedades diferentes de rinovirus, el tipo de virus responsable del mayor número de resfriados. Otros virus que causan resfriados incluyen enterovirus (virus acho y cosackie) y coronavirus. En la mayor parte de los casos, un virus específico causa que una persona esté enferma solo una vez, después de la cual se vuelve inmune a ese virus. Sin embargo, debido a que hay muchos virus que causan los síntomas de resfriado común, las personas pueden tener muchos resfriados cada año y docenas durante toda la vida.
Los niños por debajo de seis años tienen de promedio seis a ocho resfriados por año (hasta uno por mes de septiembre a abril), con síntomas de unos 14 días de duración. Esto significa que un niño puede estar enfermo con síntomas de resfriado intermitente casi la mitad de los días en este periodo de tiempo, sin motivo para la preocupación. Los niños que acuden a guarderías sufren más resfriados que los niños cuidados en casa. Sin embargo, cuando los niños que fueron a las guarderías entran en la escuela primaria, cogen menos resfriados, presumiblemente porque ya están inmunizados a un mayor número de ellos.
Patrones estacionales – El resfriado común puede ocurrir en cualquier momento del año, aunque el mayor número de resfriados ocurren en otoño e invierno, sin importar la localización geográfica. Los resfriados no están causados por los climas fríos ni por estar expuestos al aire frío.
Transmisión – Los resfriados se transmiten de persona-a-persona, ya sea por contacto directo o por contacto con el virus en el medio ambiente. Los resfriados son más contagiosos durante los primeros dos a cuatro días.
Contacto directo – Las personas con resfriados típicamente transportan los virus del resfriado en sus manos, donde es capaz de infectar de infectar a otra persona durante dos horas al menos. Si un niño con resfriado toca a otro niño o adulto, y estos, al tocar sus ojos, nariz, o boca, pueden infectarse después con ese virus.
Infección de partículas en las superficies – Algunos virus del resfriado pueden vivir en las superficies (manubrios de las puestas, juguetes, etc.) por diversos días.
Inhalación de partículas virales – Las gotitas conteniendo partículas virales pueden ser exhaladas en el aire por la respiración, tos, o estornudos. Los rinoviris no se transmiten habitualmente como resultado del contacto con gotitas infectadas, aunque el virus influenza (de la gripe) y el coronavirus pueden transmitirse por las pequeñas gotitas. Los virus del resfriado con se transmiten normalmente por la saliva.
SÍNTOMAS – Los signos y síntomas de un resfriado comienzan normalmente uno o dos días después de la infección. En los niños la congestión nasal es el síntoma más importante. Los niños pueden tener también descarga de mucosidad nasal clara, amarilla o verdosa; fiebre (temperatura superior a 38º) es común durante los tres primeros días de la enfermedad.
Otros síntomas pueden incluir dolor de garganta, tos, irritabilidad, dificultad para dormir, y disminución del apetito. La nariz se puede poner roja e hinchada, y los ganglios linfáticos del cuello pueden agrandarse ligeramente.
Los síntomas de un resfriado son normalmente peores durante los 10 primeros días. Sin embargo, algunos niños continúan teniendo descarga nasal acuosa, congestión, y tos después de pasados 10 días. Además, no es raro que un niño desarrolle un segundo resfriado cuando aún están resolviéndose los síntomas del primer resfriado; esto puede hacer que parezca que el niño tiene un resfriado que dura semanas o incluso meses, especialmente durante el otoño e invierno. Este no es un motivo de preocupación, a menos que el niño tenga cualquiera de los síntomas más serios discutidos a continuación.
Los síntomas de alergias (rinitis alérgica) son ligeramente diferentes a los del resfriado común, y pueden incluir picor muy molesto de la nariz y de los ojos.
COMPLICACIONES – La mayor parte de los niños que tienen resfriados no desarrollan complicaciones. Sin embargo, los padres deben conocer los síntomas y signos de posibles complicaciones.
Infección de oídos – Entre 5 y 15 por ciento de los niños con un resfriado desarrollan una infección viral o bacteriana de los oídos. Si un niña desarrolla fiebre (temperatura mayor de 38º) después de los primeros tres días de los síntomas de resfriado, una infección de oídos puede ser la culpable.
Asma – Los resfriados pueden causar respiración sibilante en niños que no tan tenido este tipo de respiración anteriormente, o empeoramiento del asma en niños que tienen historia de esta enfermedad.
Sinusitis – Los niños que tienen congestión nasal que no mejora después de 14 días pueden tener una infección bacteriana de los senos paranasales.
Neumonía – Los niños que desarrollan fiebre después de los primeros tres días de un resfriado pueden tener neumonía bacteriana, especialmente si el niño tiene tos y respira rápidamente.
TRATAMIENTO
Tratamiento sintomático – El tratamiento de un niño con un resfriado es diferente del tratamiento recomendado para los adultos. Se han recomendado para los síntomas del resfriado antihistamínicos, descongestionantes, medicamentos para la tos, y expectorantes, solos o en combinación. Sin embargo, ha habido pocos ensayos clínicos de estos medicamentos en niños, y no hay estudios que demuestren beneficio alguno de estos medicamentos en niños.
En Enero de 2008, la Administración de Medicamentos y Alimentos americana (FDA) publicó una advertencia recomendando que los medicamentos para el resfriado y la tos no se utilicen en niños menores de 2 años. En octubre de 2007 la FDA votó la recomendación de que estos productos no sean utilizados entres los 2 y los 6 años. Nosotros no recomendamos la utilización de medicamentos para el resfriado o la tos por debajo de los 6 años debido a que estos medicamentos no han probado ser efectivos y tiene el riesgo potencial de efectos colaterales peligrosos.
La única excepción es que un tipo de antihistamínico (difenhidramina/Benadryl) puede producir un ligero beneficio (somnolencia) a un niño con resfriado que tenga más de 12 meses. Sin embargo, hay otros posibles efectos secundarios de los antihistamínicos, incluyendo excitabilidad, respiración lenta, y alucinaciones. De este modo, después de consulta a un médico, un padre puede considerar darle difenhidramina a su niño mayor de 12 meses con el conocimiento de que el beneficio es pequeño y que son posibles otros efectos colaterales.
Los padres pueden darle paracetamol para tratar a un niño que está incómodo a causa de fiebre durante los primeros días del resfriado. El ibuprofeno puede darse a niños mayores de seis meses. La aspirina no debe darse a niños con edades inferiores a los 18 años. No hay beneficio de estos medicamentos si el niño está bien y no tiene más de 38º, y no es necesario tratar a todos los niños con fiebre. Los padres deben hablar con su médico sobre como y cuando tratar la fiebre de su hijo.
El aire humidificado puede mejorar los síntomas de la congestión nasal y la descarga acuosa. En los niños, los padres pueden echar gotas nasales para adelgazar el moco, seguido por succión para extraer temporalmente las secreciones nasales. En los niños mayores puede probarse con un spray nasal de suero salino antes de sonarse la nariz.
Los padres deben animar al niño a beber una cantidad adecuada de líquidos; no es necesario beber cantidades extra de líquidos. Los niños normalmente tienen menos apetito durante un resfriado, y pueden comer menos de lo normal: Si un niño rechaza comer o beber por un periodo prolongado de tiempo, el padre debe contactar con el médico.
Antibióticos – Los antibióticos no son eficaces para tratar los resfriados. Pueden ser necesarios si el resfriado se complica con una infección bacteriana, como una infección de oídos, neumonía o sinusitis. Si los padres piensan que su hijo ha desarrollado una de estas infecciones deben contactar con el médico.
La utilización inapropiada de antibióticos puede llevar al desarrollo de resistencia a antibióticos, y puede llevar posiblemente a efectos colaterales, tales como reacción alérgica.
Tratamientos alternativos y con hierbas – Un número de productos alternativos, incluyendo zinc, vitamina C, y productos de hierbas tales como equinácea, se recomiendan para prevenir o tratar el resfriado común. Ninguno de estos tratamientos se ha demostrado que sea efectivo en ensayos clínicos; no se recomienda su utilización.
PREVENCIÓN – Medidas higiénicas sencillas pueden ayudar a prevenir la infección con los virus que causan los resfriados. Estas medidas incluyen:
- Los lavados de las manos es una manera esencial y altamente efectiva para prevenir la transmisión de la infección. Las manos deben humedecerse con agua y jabón, y frotarlas durante 15-30 segundos. No es necesario utilizar un jabón de manos antibacteriano. Enseñar al niño a lavar sus manos antes y después de comer y después de toser o estornudar.
- Frotar las manos con alcohol es una buena alternativa para frotar las manos si no se dispone de un lavabo. Debe frotarse la superficie entera de las manos, dedos y muñecas hasta que se sequen y puede realizarse diversas veces. Estos frotamientos pueden hacerse repetidamente sin que pierdan su efectividad.
- Puede ser difícil o imposible evitar completamente a las personas enfermas, aunque los padres deben intentar limitar el contacto directo. Además, los niños que están enfermos no deben ir a la guardería o escuela, ya que esto puede causar que otros niños enfermen.
- Utilizar un limpiador en el hogar que mata a los virus (como fenol o alcohol) puede ayudar a reducir la transmisión viral.
CUANDO BUSCAR AYUDA – Si un niño desarrolla cualquiera de los siguientes síntomas o signos, los padres deben solicitar la ayuda de su médico, sin importar que sea de día o de noche.
- Rechazar cualquier bebida por un periodo de tiempo prolongado.
- Cambios en el comportamiento, incluyendo irritabilidad o letargia (disminución de la respuesta); esto normalmente requiere atención médica inmediata.
- Dificultad para respirar, respirar con mucho trabajo, o respirar rápidamente; esto normalmente requiere atención inmediata.
Los padres deben llamar al médico si desarrolla los síntomas siguientes, o si hay preocupaciones espaciales acerca del niño:
- Fiebre mayor de 38.4º que dura más de tres días
- Congestión nasal que no mejora o empeora después de 14 días
- Los ojos se enrojecen y desarrollan descarga amarilla
- Hay síntomas o signos de una infección de oídos (dolor, tirantez en el oído, molestia)
RESUMEN
- El resfriado común es un grupo de síntomas causados por un número de virus diferentes. Los niños por debajo de seis años tienen un promedio de seis a ocho resfriados por año (hasta uno por mes desde septiembre hasta abril), con síntomas que duran 14 días de promedio. Esto significa que un niño puede estar enfermo con síntomas de resfriado intermitentes casi la mitad de los días en este periodo de tiempo, sin motivo para preocuparse.
- Los resfriados son más contagiosos durante los primeros dos a cuatro días. Las personas con resfriado típicamente transportan el virus del resfriado en sus manos, donde es capaz de infectar a otra persona durante al menos dos horas. Algunos virus del resfriado pueden vivir en las superficies (mostradores, manubrios de las puertas, o juguetes) por diversos días. Las partículas conteniendo partículas virales pueden ser exhaladas en el aire por la respiración, tos, o estornudos.
- Los síntomas y signos de un resfriado comienzan habitualmente uno a dos días después de la exposición. En los niños, la congestión nasal es el síntoma más importante. Los niños pueden tener también descarga nasal clara, amarilla o verdosa, y la fiebre (temperatura mayor de 38º) es común durante los tres primeros días del resfriado. Otros síntomas pueden incluir dolor de garganta, tos, irritabilidad, dificultad para dormir, y disminución del apetito.
- La mayor parte de los niños que tienen resfriado no desarrollan complicaciones. Sin embargo los padres deben conocer los síntomas y signos de complicaciones potenciales, incluyendo infección de oídos, asma, sinusitis, y neumonía.
- Ha habido pocos ensayos clínicos de los medicamentos para el resfriado (antihistamínicos, descongestionantes, medicinas para la tos, y expectorantes) en los niños, y no hay estudios que demuestren cualquier beneficio en los niños. Nosotros no recomendamos su utilización en niños a cusa de la falta de eficacia probada y el riesgo potencial de peligrosos efectos colaterales.
- Los padres pueden darle paracetamol o ibuprofeno a niños mayores de seis meses para tratar la fiebre durante los primeros pocos días. El aire humidificado puede mejorar los síntomas de la congestión nasal y goteo nasal. Los padres deben animar al niño a beber una cantidad adecuada de líquidos; no es necesario beber líquidos extra.
- Los antibióticos nos son efectivos para tratar los resfriados. Pueden ser necesarios si el resfriado se complica con una infección bacteriana, como una infección de oídos, neumonía o sinusitis. Los padres que piensan que su hijo ha desarrollado una de estas infecciones deben ponerse en contacto con su médico. El uso inapropiado de antibióticos puede llevar al desarrollo de resistencia a los antibióticos, y puede llevar a efectos colaterales, tales como una reacción alérgica.
- Un número de productos alternativos, incluyendo zinc, vitamina C, y hierbas tales como la equinácea, son recomendados para prevenir o tratar el resfriado. Ninguno de estos tratamientos ha probado ser efectivo en ensayos clínicos; no se recomienda su uso.
- Medidas sencillas higiénicas pueden ayudar a prevenir la infección con los virus que causan resfriados, incluyendo lavado de las manos o utilización de una toallita con alcohol y limitar el contacto con otros enfermos.
DONDE OBTENER MÁS INFORMACIÓN – Su médico es la mejor fuente de información para cuestiones y preocupaciones relacionadas con su problema médico. Debido a que no hay dos pacientes exactamente iguales y las recomendaciones pueden varias de una a otra persona, es importante buscar el consejo de un médico que esté familiarizado con su situación individual.
Y algunas fuentes de información:
www.nlm.nih.gov/medlineplus/healthtopics.html
(Según UpToDate)