La polisomnografía (PGS) es el método recomendado para realizar el diagnóstico del Síndrome de Apnea-Hipopnea del Sueño (SAHS). Consiste en el registro simultáneo de variables neurofisiológicas y cardiorrespiratorias que permiten evaluar la cantidad y calidad del sueño, así como la identificación de los diferentes eventos respiratorios y su repercusión cardiorrespiratoria y neurofisiológica. Se registra la actividad electroencefalográfica, los movimientos oculares o electrooculograma (EOG) necesario para reconocer las fases del sueño y el tono muscular o electromiograma (EMG). Además es conveniente emplear electrodos que nos permitan recoger los movimientos de las extremidades inferiores. Y se considera necesario incluir sensores que permitan establecer la posición corporal mientras la persona está dormida.
La PSG deberá realizarse en horario nocturno o en el habitual de sueño del sujeto con un registro no menor de 6,5 horas y que incluya por lo menos 180 minutos de sueño.
Hoy, ya se pueden realizar polisomnografías en el domicilio del paciente y examinar al mismo tiempo los resultados.
La poligrafía respiratoria (PR) analiza las variables respiratorias y cardiacas pero no los parámetros neurofisiológicos. Es un sistema aceptado para el abordaje diagnóstico del SAHS. La principal ventaja de la PR es que se trata de un método más simple.
Las dos técnicas pueden realizarse fuera del hospital, en el domicilio del paciente. La PR es la exploración que se realiza en el domicilio más frecuentemente. En todo caso, la realización de PR domiciliarias supone que un 10-15% de ellas tengan que repetirse.
Los equipos de PR pueden ser instalados en la consulta por el técnico y el paciente se lo lleva a casa para devolverlo al día siguiente. En otros casos el paciente se lleva el equipo a casa y el mismo se lo instala antes de dormir.
También puede desplazarse el técnico al domicilio del paciente y de esta forma pueden disminuir los problemas técnicos al analizar los resultados.