Si se encuestara a los enfermos hospitalizados en el último año, en la ciudad que eligiésemos de nuestro país, sobre el funcionamiento del hospital, los resultados dependerían fundamentalmente de cómo hubiese evolucionado el proceso que motivó su ingreso hospitalario.
Existe una relación directa entre la calidad de un hospital y la de los profesionales sanitarios que trabajan en él. Sobre todo de los conocimientos y excelencia profesional de los médicos y enfermeras, pero también de la profesionalidad de muchos otros trabajadores que con su labor contribuyen a lograr una buena calidad asistencial.
Si ahora le preguntáramos a los médicos, ¿cómo es un hospital excelente?, las opiniones serían probablemente diversas. Estas son algunas características que debe tener un hospital para entrar en la categoría de excelente, o al menos bueno, según la www.clinicajoaquinlamela.com:
• Los médicos y enfermeras deben ser profesionales excelentes , con muy buenos conocimientos en su especialidad y en disposición de mejorarlos continuamente.
• La interrelación entre los médicos de diferentes especialidades tiene que ser ágil y fácil , para solucionar de la forma más rápida y segura los problemas relacionados con los procesos de los pacientes internos y externos.
• Las mismas características de excelencia profesional deben tenerlas otros profesionales que trabajan en el hospital: técnicos, auxiliares administrativos, auxiliares de enfermería, celadores, etc.
• Es un deber de los médicos compartir las decisiones clínicas con los pacientes. Muchos pacientes pueden desear mayor implicación en las decisiones relacionadas con su atención o cuidado hospitalario.
• Es un deber y un derecho de los médicos informar amplia y detenidamente a los enfermos y familiares acerca de su proceso , de los problemas que pueden ocasionarse y derivarse de las pruebas diagnósticas y del tratamiento, de las complicaciones que se hayan producido, etc., de forma que sea perfectamente comprendido por ellos. Esta información debe extremarse en el momento del alta con un informe detallado para el paciente y para su médico general. Y este deber de los médicos es igual en el caso de los pacientes y familiares que son atendidos, diagnosticados y tratados en las consultas externas sin hospitalización.
• La calidad del informe de alta médico dice mucho acerca de la categoría del hospital, del servicio y del médico que lo emite.
• El trato con amabilidad y esmerada educación y respeto a enfermos y familiares, por parte de todos los profesionales que trabajan en el hospital, es una característica esencial que debe tener un buen hospital . La sonrisa debe estar presente en la cara de los profesionales sanitarios la mayor parte de su horario de trabajo, y fundamentalmente en presencia de enfermos y familiares.
• En un buen hospital solo son hospitalizados los pacientes con enfermedades graves y urgentes. Los demás son diagnosticados y tratados con la misma rapidez en las consultas externas, sin necesidad de hospitalización.
• La organización para la realización de pruebas a pacientes, ingresos, altas hospitalarias, información a familiares, tiene que ser perfecta y todo debe estar previsto si algo falla. Las normas de funcionamiento del hospital deben estar escritas, para que los profesionales que se incorporan las conozcan y no se improvisen las actuaciones.
• Es muy importante que exista un área de información para los pacientes y familiares en la puerta de entrada del hospital.
• La señalización de las distintas zonas de consultas, pruebas diagnósticas, etc., tiene que ser tan buena como mínimo como la del aeropuerto de Londres o la de El Corte Inglés y debe estar siempre actualizada.
• Debe prestarse atención a la estética. El mobiliario, señalización, pinturas, etc., debe ser agradable a los ojos de los visitantes.
• El hospital puede ser viejo, pero no puede estar sucio . Un buen hospital está limpio, aseado, las 24 horas del día. La limpieza es constante en los pasillos, escaleras, salas de espera, etc., y por supuesto en las habitaciones de los pacientes. En algunos hospitales “sucios” es posible ver incluso colillas de cigarrillos en las escaleras a lo largo del día y de la noche. La información escrita pegada en las paredes del hospital debería evitarse al máximo pues la impresión que ofrece a los trabajadores y visitantes no es buena en general.
• Una característica fundamental de un buen hospital es el silencio . Para los enfermos y para los profesionales excelentes es esencial que en el hospital no haya ruido, para descansar los unos y trabajar adecuadamente los otros.
• En un buen hospital no se permite fumar en su interior.
• La elección de cargos directivos de un hospital -médicos, enfermeras, economistas, profesionales con conocimientos en relaciones públicas, etc.- debería hacerse por su capacitación profesional y no por afinidad política con el gobierno de turno de la comunidad autónoma, como sucede en nuestro país. Cuando hay cambios de gobierno regionales mudan los cargos directivos del hospital, y estos cambios pueden llegar a las supervisoras de enfermería.
• En un buen hospital la retribución de los médicos puede ser pactada individualmente, siempre que la dirección sea elegida por sus capacidades y no por afinidades políticas, y puede ser diferente, por el componente de retribución variable relacionado con los objetivos. En la Clínica Universitaria de Navarra cada uno de los médicos no conoce el sueldo que cobran los demás médicos.